El mercado inmobiliario español con buen semblante a la adaptación

El mercado inmobiliario español se encuentra en un momento de transición, con una disminución en el número de compradores locales, pero un crecimiento en la participación de inversores extranjeros. Este cambio está siendo impulsado por una serie de factores, como la incertidumbre global, los ajustes económicos y el aumento de los tipos de interés.

Los extranjeros toman el centro del escenario

Los datos del barómetro de UCI y SIRA muestran un aumento del 2% interanual en la participación de compradores extranjeros en el mercado inmobiliario español. En particular, las zonas costeras siguen siendo las más atractivas para los inversores internacionales.

Según los agentes inmobiliarios consultados, el 46% de los compradores extranjeros son no residentes en España. Entre las nacionalidades que lideran las compras se encuentran los latinoamericanos (19%), británicos (13%), marroquíes (11%), alemanes (10%) y rumanos (8%).

Cortesía de Qualis Optima.

Las preferencias de los compradores extranjeros

Cuando se trata de la tipología de propiedades más demandadas por los extranjeros, los pisos lideran la lista con un 60%, seguidos de apartamentos o estudios (21%) y viviendas unifamiliares (19%).

En cuanto a la finalidad de la compra, el 68% de los compradores extranjeros busca una primera residencia, mientras que el 21% busca una segunda vivienda y el 11% ve la inversión para alquiler como una oportunidad.

Aspectos valorados por los compradores extranjeros

El barómetro también revela los aspectos más valorados por los clientes extranjeros al adquirir una propiedad en España. La proximidad a servicios (28%) es el aspecto más importante, seguido de la cercanía a espacios verdes (25%) y a zonas costeras (18%).

En menor medida, los compradores consideran la cercanía a un aeropuerto (3%), que la vivienda sea nueva (10%) o que tenga una buena calificación energética (5%).

La financiación en juego

El estudio muestra que el 30% de los compradores extranjeros requiere financiación para llevar a cabo la compraventa. Esta financiación proviene en su mayoría de bancos españoles (33%) o de sus países de origen (21%).

Además, muchos consultan a brókeres tanto en España como en sus países de origen (29%), o a las propias agencias inmobiliarias (17%).

Menos compradores, precios estables

Los agentes inmobiliarios encuestados anticipan que el número de vendedores se mantendrá estable o incluso aumentará, mientras que el volumen de compradores disminuirá en los próximos meses. A pesar de esta disminución en la demanda, los precios se mantienen resistentes a la baja, según el 56% de los profesionales inmobiliarios.

Sin embargo, un 44% cree que los precios podrían experimentar una ligera disminución hasta final de año.

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Optimismo en el sector inmobiliario

El barómetro refleja un aumento en el optimismo de los profesionales del sector inmobiliario en comparación con ediciones anteriores.

Las perspectivas de empleo también se mantienen estables, con el 87% de los profesionales creyendo que las plantillas permanecerán invariables o aumentarán moderadamente hacia el cierre del año.

En conclusión

El mercado inmobiliario español se enfrenta a un período de moderación, con una disminución en el número de compradores locales, pero un crecimiento en la participación de inversores extranjeros.

A pesar de la incertidumbre, los precios se mantienen estables, y el optimismo entre los profesionales del sector sugiere que la adaptación y la estabilidad son las claves para superar estos desafíos.

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Fuente: Idealista